Los tipos de materiales de andamios

Andamios de acero

El material por excelencia y el más usado debido a su alta resistencia, incluso por su la capacidad de evadir la oxidación y corrosión.  

Al ser el acero un material común en la composición de los andamios, se conoce mucha información y documentación acerca de este elemento por lo que se ha explotado su potencial y ha vuelto muy resistentes y seguros a cualquier andamio constituido por este tipo de material.

Andamios de bambú

Este tipo de material suele ser muy llamativo e impactante dentro del mundo de la construcción, como es de esperar; su uso está extendido en todo el continente asiático y la razón es por la facilidad de obtención y bajo coste en comparación a otros materiales. En cuanto a sus resistencias, evidentemente no llega a ser como el acero, pero se asimila.

Una característica del andamio de bambú es su versatilidad a la hora de realizar un montaje debido a su capacidad de ser cortado y adaptado a cualquier necesidad. Otra ventaja es que al ser un material orgánico se hace muy fácil deshacerse de él.

Como contrapartida, no existe ningún tipo de normalización con ellos, lo que supone un reto para los montadores, además al ser muy similar a la madera convencional, tiene un gran riesgo en caso de incendio.

Andamios de fibras plásticas

Estos andamios son desconocidos dentro de la industria, sin embargo, gracias a su material de fibras plásticas son altamente resistentes a ambientes corrosivos. Además, por ser el plástico un gran aislante suele implementarse en trabajos con alto riesgo eléctrico. Una característica adicional de estos andamios es que están constituidos con un material ligero haciéndolo ideal ante terrenos poco resistentes.

Andamios de aluminio

Suelen usarse para los trabajos en los que se precisa rapidez en el montaje. Sin embargo, es un material menos resistente que el acero. A pesar de que el aluminio es uno de los materiales más abundantes, su precio suele ser elevado por la complejidad que tiene su manufactura.